BEIJING, 14 oct (Xinhua) -- "China es un socio natural para la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), y desde el establecimiento del Foro China-CELAC en 2014, las relaciones entre la región y China se han estrechado cada vez más", afirmó Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en un foro académico vía enlace de video.
El II Foro Académico de Alto Nivel China-CELAC y VI Foro de Think Tanks China-América Latina y el Caribe, organizado conjuntamente por la CEPAL, el Instituto de Relaciones Exteriores del Pueblo Chino, la Academia de Ciencias Sociales de China, el Instituto de Estudios Internacionales de China y la Fundación China de Estudios Internacionales, se llevó a cabo los días 12 y 13 de octubre en Beijing.
Un centenar de delegados chinos y latinoamericanos, en su mayoría investigadores de los citados laboratorios de ideas, asistieron de manera presencial y virtual al evento, que tuvo como tema "Cooperación entre China y América Latina: hacer frente a los desafíos y crear un futuro mejor".
"Desde el brote epidémico, China y América Latina vienen apoyándose mutuamente e implementando con acciones concretas los principios de la comunidad de futuro compartido. La cooperación sino-latinoamericana en materia de la vacuna ha redundado en beneficios tanto para ambas partes como para el mundo entero", manifestó Wang Chao, presidente del Instituto de Relaciones Exteriores del Pueblo Chino.
Frente a la crisis sanitaria, China y los países de la región han emprendido un combate integral contra la COVID-19. Las vacunas chinas han llegado a América Latina y el Caribe para ayudar a la región a establecer la inmunidad colectiva y reactivar las actividades económicas y sociales. Según datos de la Organización Panamericana de la Salud, las vacunas chinas representan el 65 y el 60 por ciento de las dosis administradas en Chile y Ecuador, respectivamente. Por su parte, más de la mitad de la población inoculada en países como Bolivia y Uruguay ha recibido vacunas chinas.
"A pesar de las trabas de la globalización, la reemergencia del proteccionismo y el impacto causado por la pandemia, las relaciones sino-latinoamericanas han pasado la prueba de las dificultades", sostuvo Wang Linggui, vicepresidente de la Academia de Ciencias Sociales de China.
China se ha mantenido como el segundo socio comercial de América Latina con un volumen comercial por encima de los 300.000 millones de dólares durante tres años consecutivos. Por su parte, América Latina y el Caribe constituye el segundo destino para las inversiones del país asiático en el exterior, además de ser un importante socio en la cooperación en capacidad productiva. De acuerdo con estadísticas de la aduana china, el intercambio comercial entre China y la región sumó 289.720 millones de dólares durante los primeros ocho meses de este año, lo que representa un aumento interanual del 46,8 por ciento.
Los vínculos entre China y la región ya han entrado en una nueva era caracterizada por la igualdad, el beneficio mutuo, la innovación, la apertura y el bienestar para los pueblos. En este sentido, "se trata de una cuestión fundamental cómo impulsar el avance de los lazos sino-latinoamericanos en esta nueva era y en un panorama marcado por la pandemia y unos cambios inéditos durante una centuria", aseveró Qiu Xiaoqi, representante especial del Gobierno chino para asuntos latinoamericanos.
Los estudiosos intercambiaron opiniones en profundidad acerca de temas tan trascendentales como el aprendizaje recíproco de experiencias de desarrollo, la construcción conjunta de la Franja y la Ruta y la Ruta de la Seda de la Salud, así como sobre la identificación de nuevas áreas y modalidades de cooperación entre China y América Latina.
Las disertaciones de los expertos chinos y latinoamericanos proporcionaron un importante apoyo intelectual al desarrollo de alta calidad de la cooperación entre ambas partes.
