Por Yosley Carrero
Imagen del 21 de octubre de 2021 de ciudadanos chinos residentes en Cuba esperando para recibir una dosis de una vacuna desarrollada por el laboratorio chino Sinopharm contra la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19), en la clínica central "Cira García", en La Habana, capital de Cuba. Actualmente un segundo grupo de ciudadanos chinos residentes en Cuba recibe la primera dosis de la vacuna Sinopharm desarrollada por el laboratorio chino Sinopharm contra la COVID-19, tras una primera fase de vacunación iniciada a mediados de septiembre del presente año.(Xinhua/Joaquín Hernández)
LA HABANA, 21 oct (Xinhua) -- El joven chino Gong Tao, de 30 años, quien ha residido en Cuba durante los últimos años, arribó temprano en la mañana a la clínica central "Cira García" ubicada en La Habana para recibir la primera dosis de Sinopharm, una de las vacunas chinas contra el nuevo coronavirus.
Gong, quien trabaja para una empresa china radicada en el país insular, comentó a Xinhua que la inmunización con la vacuna Sinopharm le va a ofrecer una mayor protección ante las cepas más contagiosas y mortíferas del nuevo coronavirus.
"Me siento contento. No tengo dudas que esto me hará menos vulnerable ante el virus y agradezco profundamente al Gobierno chino y a Cuba por esta oportunidad para vacunarme. En días como hoy recuerdo mucho a mi país", aseguró.
Actualmente un segundo grupo de ciudadanos chinos residentes en Cuba recibe la primera dosis de la vacuna Sinopharm, tras una primera fase de vacunación iniciada a mediados de septiembre del presente año.
Entre ellos se encuentra el joven Sheng Yongquan, también de 30, quien siente que ahora estará más protegido mientras Cuba aún sobrepasa la cifra de 1.000 contagios diarios a pesar del sostenido decrecimiento en el número de casos, muertes y hospitalizaciones por causa de la COVID-19 en las últimas semanas.
"Nuestra embajada en La Habana se preocupa mucho por nosotros. Estoy muy feliz tras recibir la primera dosis de esta vacuna, pero sé que debo seguir siendo cauteloso. La pandemia todavía no se acaba", indicó.
Durante una reciente visita al centro de salud, el embajador chino en Cuba, Ma Hui, agradeció el noble gesto del país insular al permitir la importación de las vacunas chinas y destacó los profundos lazos de amistad que unen a ambos pueblos.
"El Partido Comunista de China y el Gobierno chino tienen como máxima prioridad la protección de la vida de las personas. En este sentido, las vacunas son productos biológicos especiales. Esta labor que realizamos ha recibido un fuerte apoyo de las empresas y ciudadanos chinos", puntualizó.
Mientras los residentes chinos esperaban por su turno para ser inyectados, un experimentado equipo compuesto por médicos y enfermeras cubanas se encargaban de realizar la toma de temperatura corporal, chequear la presión arterial y asegurar que todos los pasos del proceso de vacunación con Sinopharm se realizaran de acuerdo con lo previsto.
La subdirectora de la clínica internacional "Cira García", Teresa Notó, comentó a Xinhua que las dos dosis de la vacuna Sinopharm son administradas a los nacionales chinos en un lapso de 21 días siguiendo los protocolos establecidos internacionalmente y las normas de seguridad.
"Todo marcha bien. Para nosotros es de mucha importancia que los residentes chinos estén aquí vacunándose. Somos dos países hermanos que compartimos similares intereses por la salud de sus ciudadanos", añadió.
