Jiang Yan, director general de la Oficina de Xinhua para Latinoamérica, resumió el año 2021 con cuatro palabras.
La primera es Estabilidad. La región de América Latina y el Caribe ha soportado el golpe de la pandemia y ha mostrado la estabilidad con una recuperación económica gradual. Las campañas de vacunación han desempeñado un papel fundamental. China ha suministrado grandes cantidades de material sanitario, como las vacunas, a más de treinta países de la región, y ha enviado expertos médicos para trabajar junto con colegas latinoamericanos.
La segunda es Cambio. En 2021, Ecuador, Nicaragua, Honduras y Chile han celebrado elecciones generales. Nicaragua y China han restablecido relaciones diplomáticas. En Cuba, como sucesor de Raúl Castro, el presidente cubano, Miguel Diaz-Canel, fue elegido primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.
La tercera es Cooperación. China sigue siendo el segundo socio comercial de Latinoamérica. En los primeros tres trimestres de 2021, el comercio bilateral de China con la región de América Latina y el Caribe ascendió hasta los 331.880 millones de dólares, lo cual supone un incremento interanual del 45,5 por ciento.
Y la cuarta es Nueva era. El unilateralismo y la intimidación están condenados al fracaso. La cooperación entre China y los países de América Latina está basada en la independencia y la igualdad, y con el desarrollo como el objetivo, creará sin duda alguna un futuro más amplio y más prometedor.