RÍO DE JANEIRO, 19 abr (Xinhua) -- El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, afirmó hoy que pidió ayuda a la Organización Mundial del Comercio (OMC) para que su país quede fuera de los embargos de fertilizantes rusos, imprescindibles para el agronegocio brasileño, y que se controlen sus precios, para evitar una "guerra de seguridad alimentaria" en el planeta.
En un acto en Cuiabá (centro-oeste), Bolsonaro explicó que trasladó personalmente su preocupación a la directora general de la OMC, la nigeriana Ngozi Okonjo-Iweala, con la que se reunió este lunes en Brasilia.
"Aproveché el momento, dada la importancia de esta señora, para pedirle que los embargos de fertilizantes no ocurran en todo el mundo, así como que estos fertilizantes no sigan aumentando de precio. En caso contrario, podremos, brevemente, estar involucrados en la guerra más cruel que se pueda imaginar, la guerra de la seguridad alimentaria", dijo Bolsonaro.
Brasil es uno de los principales productores de alimentos del mundo y su agronegocio usa fertilizantes, principalmente nitrógeno, fósforo y potasio, imprescindibles para las plantaciones.
Actualmente, Brasil consume el 8 por ciento de toda la producción mundial de fertilizantes, calculada en unos 55 millones de toneladas, e importa el 85 por ciento de estos fertilizantes, principalmente de Rusia, que debido al conflicto con Ucrania, sufre un fuerte embargo en occidente.
Bolsonaro pidió "volver a la normalidad" lo más antes posible para evitar problemas de producción de alimentos, que podrían afectar a todo el planeta, debido a que Brasil exporta para todo el mundo.
