BEIJING, 12 may (Xinhua) -- A pesar de las crecientes incertidumbres internas y externas, la economía china sigue avanzando con un impulso sano, dijo un funcionario a Xinhua en una entrevista.
"Aunque algunos indicadores experimentaron contracciones a corto plazo, principalmente debido al golpe de la COVID-19, los fundamentos que sustentan el desarrollo estable y sólido impulso de la economía permanecen inalterados", señaló Sheng Laiyun, subdirector del Buró Nacional de Estadísticas.
En particular, la tendencia general del país hacia la mejora económica y el desarrollo de alta calidad no ha cambiado, indicó.
La economía china tuvo un comienzo estable en el primer trimestre de este año, con un producto interno bruto (PIB) que creció 4,8 por ciento interanual, acelerándose de un incremento de 4 por ciento en el cuarto trimestre del año pasado.
Sin embargo, la contracción de la demanda, las perturbaciones de la oferta y el debilitamiento de las expectativas han afectado a la economía desde marzo. Sheng mencionó que impulsar políticas macroeconómicas múltiples es la clave para reducir al mínimo el impacto de la COVID-19 y asegurar que la economía funcione en un rango razonable.
El país ha prometido adherirse inquebrantablemente a su política dinámica de cero COVID para consolidar los resultados de la labor de prevención y control que tanto ha costado conseguir, añadió Sheng.
También hizo hincapié en la intensificación de las políticas a favor del crecimiento y en aprovechamiento al máximo de la inversión efectiva. "La historia ha demostrado que la expansión de la inversión en infraestructura es la manera más eficaz y rápida de salir de las dificultades económicas a corto plazo", dijo.
La cantidad de infraestructura per cápita de China apenas constituye entre 20 y 30 por ciento de la de los países desarrollados, y su longitud de explotación ferroviaria per cápita es inferior al 30 por ciento de la cifra de Estados Unidos, lo que muestra un gran potencial de inversión en infraestructura, añadió Sheng.
Asimismo, mencionó medidas como la reducción de impuestos y tarifas, el aplazamiento de los pagos de las contribuciones a la seguridad social y la emisión de préstamos inclusivos para apuntalar a las entidades del mercado.
Al destacar la creciente presión inducida por la COVID sobre el mercado de trabajo, Sheng subrayó la importancia de la implementación plena y completa de las políticas favorables al empleo.
"Con la entrada en vigor de las políticas para coordinar el control de la pandemia con el desarrollo socioeconómico, se espera que el impacto de la COVID-19 se reduzca gradualmente", dijo Sheng, que citó las señales positivas que ya se observan en los datos de generación y consumo de electricidad.
También se deben hacer esfuerzos para garantizar suministros y precios estables, agregó.
