BRASILIA, 20 ene (Xinhua) -- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, mantuvo hoy viernes la primera reunión desde que asumió el poder el 1 de enero con los comandantes de las Fuerzas Armadas, con quienes discutió un plan de desarrollo para el área militar y para la industria de defensa.
En el encuentro, realizado en el Palacio de Planalto, sede presidencial, participaron los jefes del Ejército, general Júlio Cesar de Arruda; de la Marina, almirante Marcos Sampaio Olsen; y de la Fuerza Aérea, teniente brigadier Marcelo Kanitz Damasceno; así como el vicepresidente Geraldo Alckmin; y los ministros jefe de Gabinete, Rui Costa, y de Defensa, José Múcio.
En rueda de prensa, Múcio dijo que no fueron discutidos los hechos del 8 de enero, cuando miles de partidarios del expresidente Jair Bolsonaro asaltaron el palacio presidencial y los edificios del Congreso y la Corte Suprema.
Más de 1.500 personas que participaron en los ataques, muchas de ellas acampadas frente al Cuartel General del Ejército, en Brasilia, fueron detenidas.
"Si me preguntan si nos hemos ocupado del 8 (de enero), no lo hemos hecho. Es un tema que depende de la Justicia", afirmó.
Según el ministro, durante el encuentro fueron discutidos un posible plan de inversiones para la industria de defensa brasileña y posibles iniciativas público-privadas en el sector.
"Tratamos de la capacidad de generación de empleo que tiene Brasil en la industria de defensa. Y estuvieron presentes el presidente de Fiesp (Federación de Industrias del Estado de Sao Paulo), Josué (Gomes), y otros cinco empresarios, todos proponiendo soluciones para que pongamos recursos en la industria de defensa brasileña", dijo.
Múcio subrayó que tanto el presidente como los comandantes quieren dejar atrás la desconfianza y trabajar en una agenda común.
Lula "es consciente, y las Fuerzas Armadas también, de la atención que prestó a las Fuerzas Armadas. Y él quiso renovar esa confianza", afirmó en referencia a las inversiones en defensa del presidente en sus anteriores mandatos.
"Tenemos que pensar en el futuro, pacificar este país y gobernar", sentenció.
El ministro de Defensa informó que los mandos de las Fuerzas Armadas están de acuerdo con castigar al personal militar que hubiera participado en los actos si así se demuestra.
"Los militares son conscientes y están de acuerdo en que tomemos las medidas necesarias. Evidentemente, en el calor de la emoción, debemos tener cuidado para que estas acusaciones sean justas, para que las penas sean justas. Pero todo se hará a su debido tiempo", añadió.
En opinión de Múcio, no volverán a producirse ataques extremistas similares a los del 8 de enero.
"No tengo la menor duda de que no se producirá otro (atentado) como ese, porque las Fuerzas Armadas se anticiparán", afirmó.
















