CARACAS, 3 may (Xinhua) -- El canciller venezolano, Yván Gil, denunció este miércoles que Estados Unidos comete una burla contra el proceso de conversaciones sobre la realidad política venezolana convocado por el presidente colombiano Gustavo Petro, al emitir la "Licencia 42" que busca despojar al Estado venezolano de la estatal petrolera venezolana Citgo, con sede en Houston.
La referida licencia fue divulgada hace dos días por la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de Estados Unidos y para Venezuela supone un "zarpazo" en contra del incipiente proceso de diálogo que convocó Bogotá.
"Hemos expresado la burla que ha significado esta licencia en contra del espíritu de la reunión convocada por el presidente Petro", recalcó Gil.
Lo anterior lo expresó el canciller en Caracas ante todos los jefes diplomáticos de los países que acudieron a la reunión convocada por Colombia el pasado 25 de abril.
Tanto a la reunión en Bogotá como a la sede de la Cancillería venezolana hoy, acudieron representantes de Francia, Bolivia, Portugal, México, Turquía, Argentina, España, Italia, Alemania, Chile, Brasil, Noruega, Sudáfrica, San Vicente y Las Granadinas, Colombia y la Unión Europea.
El diplomático venezolano aseguró hoy que dichos países acudieron a la reunión en Bogotá "con buena fe para aportar soluciones en las negociaciones que desarrolla el Gobierno Bolivariano con parte de la oposición venezolana".
Sin embargo, a juicio de Caracas, "el resultado es que, una semana después, Estados Unidos ha emitido esta licencia que trata de consumar un robo de nuestra principal industria petrolera en ese país, como es Citgo".
Destacó además que, en Bogotá, de modo casi unánime, la mayoría de las naciones pidieron a Washington iniciar un proceso de levantamiento de las sanciones para facilitar los procesos de diálogo político entre los factores venezolanos.
Gil subrayó que, en adelante, desde el Gobierno venezolano seguirán informando al cuerpo diplomático acreditado en Venezuela las diversas violaciones al derecho internacional que Estados Unidos sigue cometiendo mediante las medidas coercitivas unilaterales.
















