RÍO DE JANEIRO, 21 may (Xinhua) -- Seis universidades situadas en la Amazonía anunciaron hoy la creación del Instituto Amazónico del Mercurio (Iamer) con el objetivo de aunar esfuerzos en el estudio de la contaminación por metales en la región, una de las principales causas de la deforestación amazónica y que causa graves problemas de salud a las poblaciones indígenas.
La idea del Iamer, que cuenta con el apoyo del Ministerio de Justicia, es producir investigación científica, formación profesional y compromiso comunitario para abordar el problema, que afecta al medio ambiente y a la salud pública de las comunidades.
En el instituto participan investigadores de las universidades federales de Pará (UFPA), Pará Oeste (Ufopa), Amapá (Unifap) y Rondônia (Unir), así como de la Universidad de Gurupi en Tocantins (UnirG) y de la Universidad Estatal de Amazonas (UEA).
"Las acciones de Iamer facilitarán el trabajo que realizan muchos grupos en la Amazonia, porque aporta visibilidad y capacidad de articulación a la hora de obtener recursos. Mejorará el rendimiento del gasto público en estas acciones. La idea es apoyarnos mutuamente aquí en la Amazonia", explicó la coordinadora de Iamer, Maria Elena Crespo López, que también es profesora de la UFPA.
El mercurio es un metal que, a temperatura ambiente, se encuentra en estado líquido y se utiliza en la minería para separar el oro de los minerales sin valor comercial. En este proceso, el mercurio acaba esparciéndose por el agua, el suelo y la atmósfera (ya que también se volatiliza en el proceso de separación del oro).
Esto no sólo contamina el medio ambiente, sino también las plantas, los peces y, en consecuencia, las personas que los consumen.
Una de las primeras propuestas del instituto es crear al menos un centro para realizar pruebas de contaminación por mercurio a las personas en cada estado amazónico. Otra propuesta es reunir datos fiables y realistas en los que basar las políticas públicas con efectos duraderos en la Amazonia, como la aprobación de una ley, actualmente en el Senado, que pretende establecer la Política Nacional de Prevención de la Exposición al Mercurio en Brasil.
"El impacto del mercurio en la población amazónica va mucho más allá de los problemas neurológicos en los casos de intoxicación aguda. Pero el gran problema es que, incluso en cantidades bajas, cuando una persona está expuesta de forma continuada, empieza a afectar al corazón, al aprendizaje de los niños y también hay costes de seguridad social", dijo Crespo López.
La coordinadora del Iamer advirtió, sin embargo, de que el problema va más allá de las fronteras de la Amazonia, ya que una vez en el agua y la atmósfera, el mercurio puede viajar grandes distancias. "La ciencia ya ha demostrado que el mercurio generado en Sudamérica -el 80 por ciento procede de la Amazonia- llega a regiones tan lejanas como el Ártico. Si el mercurio generado en el Amazonas está llegando al Ártico, está llegando a todo Brasil", afirmó.
Además, los productos alimentarios contaminados por mercurio pueden comercializarse en otros lugares.
