MADRID, 27 jul (Xinhua) -- Los embalses españoles de titularidad estatal podrán, a partir de ahora, albergar plantas fotovoltaicas flotantes, según una medida aprobada por el Gobierno este mes, que ampliará la superficie para producir energía solar en el país.
Estas instalaciones, argumentó el Ejecutivo, son beneficiosas para la producción energética y el medio ambiente, puesto que producen más electricidad que sus equivalentes en tierra, gracias a los efectos del enfriamiento del agua y la disminución del polvo.
Los permisos para instalar este tipo de plantas tendrán un máximo de 25 años. Y los paneles podrán ocupar del 5 al 15 por ciento de la superficie de los embalses en función de la calidad de las aguas, es decir, ocuparán más espacio cuanto peor sea el estado del agua.
La medida "ayuda a aumentar la capacidad solar de España, ya que suma superficie en la que es posible realizar la instalación" y, además, "no se pierde el uso original del terreno o superficie destinada a fotovoltaica ni se compromete el uso futuro", explicó a Xinhua la directora de operaciones de la empresa SotySolar, Lucía Arribas.
Entre las ventajas de estas instalaciones, destacó que aumentarán la eficiencia entre un 10 y un 15 por ciento en comparación con los sistemas solares en tierra, debido al efecto refrigerante del agua y que la energía se produce más cerca de donde se consume.
Además, precisó, reducen en más del 80 por ciento la evaporación, ya que la superficie está cubierta por el agua, mejoran la calidad del medio acuático, reduciendo algas y microorganismos, y sirven para conservar usos originales del suelo como bosques, cultivos agrícolas o ganadería.
Según agregó la experta, no generan impacto visual negativo y, además, permiten regenerar áreas contaminadas o no productivas.
"Además del despliegue de la fotovoltaica en tierra, existe un creciente interés para instalar plantas solares flotantes, como balsas de riego para abaratar costes energéticos de los regantes", explicó la ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera.
En total, hay unos 106 embalses del dominio hidráulico público en los que se podrán ubicar paneles solares flotantes, precisó.
Sin embargo, no se instalarán plantas fotovoltaicas en lagos, lagunas u otras masas de agua que no se consideren muy modificadas o artificiales, ni en aquellas superficies que, siendo muy modificadas o artificiales, estén sujetas a protección ambiental, según establece la norma.
Las plantas flotantes, señalan los expertos, también permiten aprovechar infraestructuras ya disponibles, pues los embalses suelen tener plantas hidroeléctricas instaladas con infraestructura de evacuación eléctrica y puntos de conexión disponibles.
La energía solar fotovoltaica lideró en junio, por segundo mes consecutivo, el mix de generación eléctrica de España, con una cuota del 22,2 por ciento del total.
España tiene como objetivo que, de aquí a 2030, las energías renovables representen un 48 por ciento del uso final de la energía. Y que, en generación eléctrica, su cuota alcance el 81 por ciento.
"Al emplear la energía producida mediante plantas flotantes, se reduce el consumo de energía proveniente de otras fuentes no renovables y, por tanto, se reducen las emisiones de gases de efecto invernadero", puntualizó Arribas.
