BRASILIA, 29 jul (Xinhua) -- El sector público brasileño registró en los últimos 12 meses un déficit acumulado del sector público consolidado de 272.200 millones de reales (unos 48.283 millones de dólares), equivalentes al 2,44 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), informó hoy lunes el Banco Central.
En el primer semestre de 2024 hubo un déficit acumulado de 43.400 millones de reales (unos 7.684 millones de dólares), duplicando el registrado en el mismo periodo de 2023, que fue de 20.400 millones de reales (unos 3.611 millones de dólares).
El déficit primario en el primer semestre de 2024 equivale al 0,78 por ciento del PIB, comparado con el 0,39 por ciento del PIB en el mismo periodo del año anterior. Este ha sido el mayor déficit semestral desde 2020.
En junio, el sector público registró un déficit primario de 40.900 millones de reales (unos 7.241 millones de dólares), ante un déficit de 48.900 millones de reales (unos 8.658 millones de dólares) en el mismo mes del año pasado.
Los números se refieren al desempeño fiscal del Gobierno federal, los estados, municipios y empresas estatales, excluidos bancos y la petrolera Petrobras, sin contar el pago de intereses de deuda.
En un mensaje al país, el presidente Luiz Inácio Lula da Silva reafirmó la noche del domingo el compromiso del Gobierno con la responsabilidad fiscal.
De acuerdo con el informe del Banco Central, el resultado nominal del sector público, que incluye el pago de intereses de la deuda, mostró un déficit de 135.700 millones de reales (unos 24.026 millones de dólares) en junio.
En un periodo de 12 meses, el déficit nominal alcanzó 1,10 billones de reales (unos 194.762 millones de dólares), equivalente al 9,92 por ciento del PIB.
La deuda del sector público consolidado registró una alza de 1,1 puntos porcentuales del PIB en el último mes, al pasar de 76,7 por ciento del PIB en abril de este año a 77,8 por ciento del PIB en mayo, el equivalente a 8,7 billones de reales (unos 1,54 billones de dólares).
Para 2024, la meta fiscal, establecida por la Ley de Directrices Presupuestarias (LDO), es un déficit de hasta 13.310 millones de reales (unos 2.356 millones de dólares) para las cuentas consolidadas del sector público.
El objetivo del Gobierno es reducir a cero el déficit primario de las cuentas públicas este año, aunque existe un intervalo de tolerancia de 0,25 puntos porcentuales previsto en el marco fiscal.
