LA PAZ, 19 ago (Xinhua) -- El presidente de Bolivia, Luis Arce, promulgó hoy lunes la Ley de Régimen Excepcional y Transitorio de Elecciones Primarias, normativa que suspende las primarias de candidaturas presidenciales y que ha generado un intenso debate en el país rumbo a los comicios generales de 2025.
La decisión de suspender las primarias se produce luego de un proceso de diálogo convocado el 10 de julio pasado por el Tribunal Supremo Electoral (TSE), en el que participaron representantes de organizaciones políticas, así como de los ámbitos Ejecutivo, Electoral y Legislativo.
El encuentro promovido en respuesta a preocupaciones sobre superposición de calendarios electorales culminó en un consenso que busca garantizar la integridad del proceso de elecciones en Bolivia.
Arce expresó en redes sociales que la suspensión de las primarias es una medida "excepcional" que no compromete la realización de las elecciones generales programadas para agosto de 2025.
"Hoy hemos recibido la Ley de Régimen Excepcional y Transitorio de Elecciones Primarias y la estamos promulgando de inmediato, en cumplimiento del acuerdo alcanzado entre órganos del Estado y organizaciones políticas en la reunión del 10 de julio, convocada por el Tribunal Supremo Electoral", señaló.
El mandatario boliviano aseguró también que están garantizados los recursos necesarios para las elecciones judiciales del 1 de diciembre venidero, en cumplimiento a lo estipulado por la Constitución.
"Como Gobierno garantizamos los recursos necesarios para la realización de las Elecciones Judiciales el 1 de diciembre de 2024, tal como lo estableció el TSE, así las autoridades del Órgano Judicial serán elegidas por voto directo del pueblo boliviano, cumpliendo con nuestra Constitución Política del Estado ¡El camino es y siempre será la democracia!", expresó.
La Ley 1578 que establece la suspensión de las primarias fue aprobada por el Senado de Bolivia después de un proceso legislativo marcado por intensos debates y la participación activa de múltiples sectores.
La suspensión de las elecciones primarias plantea un nuevo escenario político en Bolivia, donde las organizaciones políticas deberán ajustar sus estrategias de cara a los comicios de 2025, al tiempo que la atención se centra ahora en las elecciones judiciales, proceso que según el TSE es crucial para el fortalecimiento de la democracia en el país.
