QUITO, 30 ago (Xinhua) -- El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, renovó hoy por 30 días el "estado de excepción" por "grave conmoción interna" vigente desde el pasado 2 de julio en seis provincias y un cantón (municipio) del país, afectados por la violencia criminal atribuida a grupos de delincuencia organizada.
Mediante decreto, Noboa dispuso renovar la medida en las provincias de Los Ríos (oeste), Guayas (suroeste), Santa Elena (suroeste), Manabí (noroeste) y El Oro (suroeste), así como en la provincia amazónica de Orellana y el cantón (municipio) Camilo Ponce Enríquez, en la provincia de Azuay (sur).
"La decisión permitirá reforzar las estrategias y medidas implementadas por la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas para precautelar la seguridad ciudadana e integral; así como el orden público y la protección interna", dijo la Presidencia en un comunicado.
Por otra parte, el mandatario determinó que se mantenga el toque de queda de 22:00 a 05:00 hora local que decretó el pasado 8 de agosto en 19 cantones (municipios) y una parroquia, golpeadas por el auge de la delincuencia e inseguridad.
La Presidencia indicó que "bajo un riguroso análisis técnico se ha focalizado geográficamente la declaración de estado de excepción para atender con mayor eficiencia las necesidades de seguridad en estos territorios".
En el decreto presidencial se señala que los actos violentos y demás modus operandi de los grupos armados organizados "persisten" en estos territorios, por lo que es necesario mantener el mismo régimen excepcional.
Ecuador se encuentra desde el pasado 9 de enero en un "conflicto armado interno" que el presidente Noboa declaró en el país contra 22 bandas del crimen organizado calificadas como "terroristas", tras una escalada de la violencia.
Bajo esa medida, los militares fueron desplegados a las calles y zonas conflictivas para neutralizar las actividades de estos grupos criminales vinculados al narcotráfico.
Noboa ha declarado varios estados de excepción en lo que va de su mandato, que inició el pasado 23 de noviembre, en un intento por frenar la ola de inseguridad que golpea a la nación con asesinatos, secuestros y extorsiones, entre otros delitos.
Ecuador cerró el año 2023 como uno de los países más peligrosos de América Latina, con una tasa de homicidios de 45 por cada 100.000 habitantes, según la Policía.
De acuerdo con el Gobierno, las muertes violentas se han reducido en un 17 por ciento en lo que va de 2024 gracias a los operativos de las fuerzas de seguridad.