SAO PAULO, 23 oct (Xinhua) -- El 54 por ciento de los casos de demencia en América Latina se puede prevenir si se implementan medidas de atención adecuadas, reveló un estudio pionero de la Universidad de Sao Paulo (USP) divulgado hoy miércoles en Brasil.
Este índice supera el promedio mundial, que es del 40 por ciento, según lo informado por la Facultad de Medicina de la USP. La investigación, publicada en la prestigiosa revista "The Lancet Global Health", se basó en datos de pacientes de Brasil, Argentina, Bolivia, Chile, México y Perú.
Liderado por la doctora Claudia Kimie Suemoto, profesora de Geriatría de la USP, el estudio subraya la "urgencia de aplicar intervenciones preventivas en la región, ya que los factores de riesgo modificables son condiciones que pueden ser alteradas mediante el estilo de vida o con el acceso a tratamientos médicos, es decir, se pueden prevenir".
El estudio analizó mediciones de 12 factores: bajo nivel educativo, pérdida auditiva, hipertensión, obesidad, tabaquismo, depresión, aislamiento social, inactividad física, diabetes, consumo excesivo de alcohol, contaminación del aire y lesiones cerebrales traumáticas.
Los datos abarcan de 2015 hasta 2021 con 107.907 participantes mayores de 18 años.
"Es la primera vez que toda una región cuenta con un estudio tan sólido. No hay nada parecido en Europa o Asia, que también son conjunciones de países, como América Latina", explicó Suemoto.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), en la actualidad 55 millones de personas padecen demencia en todo el mundo y más del 60 por ciento de los casos se concentra en los países en vías de desarrollo.
Según el comunicado, en América Latina las investigaciones revelaron que los principales factores de riesgo son la obesidad, la inactividad física y la depresión.
"Estos son factores relacionados con el estilo de vida y la idea del análisis es aislar cada uno de ellos para identificar el potencial para prevenir la demencia. Por ejemplo, cuando se realiza actividad física con regularidad, se mejora la salud vascular, lo que favorecerá una mejor nutrición y oxigenación cerebral. La obesidad puede estar relacionada con la demencia a través de la promoción de la neuroinflamación", apuntó la especialista.
Para la doctora brasileña, la demencia tiene "alto nivel de prevención" y está vinculada a políticas públicas que colaboran para reducir los factores de riesgo.
"En Argentina, el bajo nivel educativo no prevalece como factor de riesgo debido a las políticas públicas que en el pasado elevaron la tasa de escolaridad. Otro punto importante está relacionado con el tabaquismo. Prácticamente ningún país de América Latina tiene un ratio atribuible muy alto porque desde hace mucho tiempo existen políticas que inhiben el uso del cigarrillo, prohíben el consumo en espacios cerrados o gravan el producto", añadió.