BRASILIA, 18 nov (Xinhua) -- El presidente de la Agencia Espacial Brasileña (AEB), Marco Antonio Chamon, destacó los fructíferos resultados del programa de Satélites de Recursos Terrestres China-Brasil (CBERS, siglas en inglés), como modelo de cooperación tecnológica Sur-Sur con beneficios concretos para las sociedades.
En una entrevista reciente con Xinhua en la sede de la AEB en Brasilia, Chamon subrayó los importantes avances en el desarrollo tecnológico, las aplicaciones y el impulso de la industria nacional de ambos países propiciado por la cooperación aeroespacial.
Mencionó también otros proyectos de colaboración en áreas como el clima espacial y la astronomía, así como el impacto positivo de la apertura de datos satelitales al mundo, y destacó la relevancia del programa CBERS para la preservación del medio ambiente y la respuesta a desastres naturales.
"La cooperación con China en el área espacial es una cooperación que tiene hoy más de 35 años, con gran éxito. Una cooperación en la cual hubo un gran desarrollo por el lado brasileño, en áreas como desarrollo tecnológico, de aplicaciones, de nuestra industria nacional. Hubo grandes beneficios por el lado brasileño y entiendo que el programa avanzó en esta cooperación con beneficios para China también", señaló.
Manifestó que "esta es una cooperación muy fructífera", y recordó que se trata de una cooperación muy antigua, quizás la cooperación Sur-Sur más antigua en el área espacial, y sigue siendo vigorosa.
Apuntó que es importante para muchos países, tanto para "aquellos que están emergiendo en el área espacial como para aquellos que quieren expandir sus actividades espaciales. Además de la reducción de costos, muestra otras cosas importantes. La industria local se privilegia, el desarrollo de la tecnología local se privilegia", detalló, añadiendo que también es beneficioso para el desarrollo de aplicaciones que pueden evaluarse de acuerdo con las necesidades del país.
Explicó que el programa CBERS tiene un importante papel en las calamidades naturales, como en las inundaciones ocurridas en mayo pasado en el estado brasileño de Rio Grande do Sul.
"Cuando existen calamidades de esta naturaleza, es la disponibilidad de información para ayudar a la defensa civil, a la Policía y el apoyo a las poblaciones afectadas. Utilizamos las imágenes de los satélites CBERS y de otros satélites que Brasil tiene", afirmó.
"Primero, durante el momento de la catástrofe, informando para que se puedan coordinar las acciones, y en un segundo momento, pasada la crisis, existe la necesidad de evaluación de lo que ocurrió, y usamos nuestro satélite para orientar al Gobierno sobre cómo invertir, cómo indemnizar a las familias, cómo ayudar, cuáles son las áreas que necesitan apoyo. Es importante tanto durante como después de la crisis", agregó.
Otra área en que el programa de satélites sino-brasileño cumple un papel fundamental es en la preservación del medio ambiente.
"La mayoría de las aplicaciones satelitales en Brasil están orientadas hacia nuestros biomas, principalmente la Amazonía. Tenemos un sistema de alertas en tiempo real, que llamamos DETER en Brasil, que utiliza los datos de los dos CBERS que están en órbita hoy, el CBERS-4 y el CBERS-4A. Este sistema se utiliza para alertar a las fuerzas policiales, para prohibir o prevenir la deforestación ilegal. Los sistemas de alerta para el monitoreo ambiental, en el caso de la preservación de la selva tropical, son esenciales", explicó.
Según el presidente de la AEB, aunque el área de satélites es el más visible, hay proyectos de cooperación tecnológica entre China y Brasil que son muy importantes.
"Actualmente, tenemos, por ejemplo, un laboratorio conjunto en el área de clima espacial. Son estudios de la ionosfera que son bastante importantes para nosotros y que afectan cuestiones de comunicación, afectan cuestiones de geolocalización. Además, también tenemos cooperación en un telescopio para cosmología, en el área de astronomía", explicó.
Detalló que también están colaborando en el desarrollo de un satélite de observación radar que permite ver a través de las nubes y monitorear fenómenos como la deforestación. "Además, estamos desarrollando un satélite geoestacionario para meteorología, que fortalecerá nuestra capacidad para realizar pronósticos meteorológicos", señaló.
Existe un gran potencial para avanzar aún más la cooperación Brasil-China ampliando los lazos académicos y científicos, consideró.
"Podríamos ampliar el intercambio científico, más artículos escritos, más desarrollo de investigaciones en conjunto. Acercar más nuestras universidades sería algo de gran valor. Y un segundo punto sería la formación de personal. Hemos avanzado algo en estas áreas. Más estudiantes brasileños volviendo a estudiar en universidades chinas, además de la posibilidad del camino inverso también", afirmó.
Finalmente, Chamon elogió el rápido desarrollo de China en el área espacial, que le permitió colocarse a la vanguardia tecnológica, con múltiples conquistas.
"El desarrollo de China es completo desde un punto de vista espacial. Desde las observaciones alrededor de la Tierra hasta las sondas, incluyendo un aterrizaje robótico en la Luna, con el retorno de muestras. China tiene una paleta de tecnologías y resultados que es completa. Brasil no siguió a China en toda esta apertura. China está en la frontera de lo que se hace en el área de tecnología espacial, no tengo ninguna duda sobre eso", concluyó.