BOGOTÁ, 5 dic (Xinhua) -- La canciller colombiana, Yolanda Villavicencio, manifestó este viernes su rechazo frente a los ataques adelantados recientemente por Estados Unidos en aguas del mar Caribe y la "creciente normalización" de operaciones extraterritoriales del país norteamericano sin autorización que dejan más de 80 personas muertas.
"Ningún Estado puede realizar operaciones armadas en el territorio de otro sin su consentimiento expreso. Tal acción violaría de forma directa la Carta de las Naciones Unidas y los principios fundamentales que sostienen la paz y la estabilidad internacionales", señaló la alta funcionaria en un comunicado.
Villavicencio advirtió que estos ataques de Estados Unidos en aguas cercanas a Latinoamérica y el Caribe "erosionan el orden jurídico internacional y abren un precedente sumamente peligroso en una región que se reconoce como zona de paz".
De otro lado, la canciller sostuvo que la prohibición del uso de la fuerza, el respeto por la soberanía y la integridad territorial, y el deber de resolver controversias por medios pacíficos no son simples formalidades diplomáticas sino "obligaciones jurídicas vinculantes para todos los Estados, sin excepción".
"Ignorarlas significa debilitar las bases mismas del sistema internacional y poner en riesgo la convivencia hemisférica", señaló.
Por último, Villavicencio recordó que el actual Gobierno de Colombia viene enfrentando como ninguno el flagelo del narcotráfico a través de distintas estrategias que incluyen un enfoque integral en materia social, económica y ambiental.
"Somos un país que ha cumplido con sus responsabilidades, que ha cooperado con la comunidad internacional y que ha asumido los costos humanos y materiales de esa lucha. Nada de ello puede ser utilizado para justificar amenazas, injerencias o acciones que contravienen el derecho internacional", aseguró.
Entre tanto, en las últimas horas se reportó un nuevo ataque del Ejército estadounidense con misil a una embarcación, presuntamente cargada con cocaína, en el que murieron cuatro personas.
De acuerdo con el Gobierno de Estados Unidos estos ataques que iniciaron el pasado mes de septiembre y que varios países han calificado como desproporcionados e ilegales, hacen parte de su nueva política antidrogas.








