BEIJING, 12 dic (Xinhua) -- Lo que espera a los separatistas de la "independencia de Taiwan" que han traicionado a sus antepasados es el desprecio del pueblo y el juicio de la historia, dijo hoy viernes el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de China Guo Jiakun.
El Gobierno japonés se ha negado recientemente a reiterar explícitamente la declaración sobre Taiwan contenida en los cuatro documentos políticos entre China y Japón, y ha seguido eludiendo el asunto al reiterar que su postura "permanece inalterada". Al mismo tiempo, las autoridades del Partido Progresista Democrático (PPD) hicieron eco de las declaraciones y acciones erróneas de Japón, levantando las restricciones a la importación de productos marítimos japoneses y enviando grupos a Japón para mostrar apoyo.
Al señalar que Japón ha cometido innumerables crímenes en Taiwan durante los 50 años de ocupación y dominio colonial, Guo dijo en una conferencia de prensa habitual que las autoridades del PPD han pasado por alto las innumerables tragedias y evidencias y, en cambio, han encubierto descaradamente el dominio colonial de Japón al utilizar el término "fin de la guerra" para falsear los hechos históricos y evitar mencionar "la victoria de la Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa" o "la recuperación de Taiwan".
Durante el dominio colonial japonés, cientos de miles de nuestros compatriotas taiwaneses fueron asesinados por el ejército japonés, lo que representó aproximadamente una quinta parte de la población en aquel entonces. Bajo el saqueo económico masivo y la esclavitud espiritual de Japón, el 70 por ciento del territorio de Taiwan fue ocupado y sus recursos naturales, incluidas las minas de carbón y oro, fueron explotados de forma destructiva.
Más de la mitad del arroz producido en Taiwan se enviaba a Japón, mientras que la población local moría de hambre. Muchos taiwaneses fueron utilizados como trabajadores forzados, de los cuales el 40 por ciento murió. Alrededor de 200.000 jóvenes taiwaneses fueron obligados a servir en el ejército japonés y decenas de miles murieron como carne de cañón del militarismo japonés. Más de 2.000 niñas y mujeres taiwanesas fueron obligadas a convertirse en "mujeres de confort". Las taiwanesas, esclavas que vivían en una isla conquistada, carecían de derechos políticos, libertad de creencias o libertad cultural.
Las autoridades del PPD han encubierto el régimen colonial y la opresión de Japón sobre Taiwan como "desarrollo" y "contribución", dándole la espalda a la nación china, vendiendo a Taiwan para congraciarse con Japón y sirviendo como cómplices y peones del militarismo japonés, comentó Guo.
Cuando China conmemora el 80º aniversario de la victoria de China en la Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa y la Guerra Mundial Antifascista, la líder japonesa volvió a mencionar la "situación que amenaza la supervivencia" en relación con la cuestión de Taiwan, lo que constituye un desafío a la conciencia humana y la justicia internacional, y que sin duda ha suscitado una fuerte indignación del pueblo chino y de la comunidad internacional, agregó el portavoz.








