El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, asiste a una reunión en el Palacio de Planalto, en Brasilia, Brasil, el 10 de marzo de 2023. (Xinhua/Lucio Tavora)
BRASILIA, 13 mar (Xinhua) -- El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, prometió hoy lunes acelerar la demarcación de las tierras indígenas brasileñas y retirar de ellas a todos los mineros ilegales.
La declaración fue hecha durante la 52ª Asamblea General de los Pueblos Indígenas de Roraima, en el norte del país, tras ser informado por los líderes locales sobre las condiciones sanitarias y la amenaza de invasores en sus tierras.
"Tenemos que intentar legalizar rápidamente todas las tierras donde hay estudios casi listos, para que los indígenas puedan ocupar sus territorios, para aumentar su capacidad de producción y para que nos ayude a cuidar del clima", dijo Lula.
De esta forma, continuó, se podrá demostrar que "este mundo puede producir alimentos sin tener que derribar ni un árbol más de la Amazonía, sin tener que estropear ni un río más, sin tener que contaminar más el agua".
La demarcación es una competencia exclusiva del poder ejecutivo, según la Constitución brasileña, que considera el derecho de los pueblos indígenas a las tierras como originario, por ocuparlas antes de la formación del Estado nacional.
Las demarcaciones se paralizaron por completo durante el Gobierno del expresidente Jair Bolsonaro (2019-2023).
Lula da Silva había visitado el estado norteño en enero, luego de que se conociera la crisis humanitaria del pueblo yanomami causada por la invasión de mineros ilegales en su territorio.
El presidente dijo que los mineros habían "destruido" los ríos de la región con mercurio y que el Gobierno tendría que retirar agua de pozos artesianos para que los niños pudieran beber.
"Sacaremos a los mineros de todas las tierras indígenas. Aunque haya oro en tierras indígenas, ese oro no pertenece a nadie" y, por lo tanto, afirmó Lula, "nadie tiene derecho a tocarlo sin permiso de esos pueblos, que son los verdaderos dueños de esas tierras".
A su juicio, "la sociedad brasileña está tomando conciencia de que los indígenas brasileños no ocupan ningún metro de tierra de nadie en este país".
El mandatario brasileño también prometió combatir la acción de los madereros y crear líneas de financiación para la producción agrícola en tierras indígenas.