Personas caminan por una calle, en Sao Paulo, Brasil, el 17 de agosto de 2022. (Xinhua/Rahel Patrasso)
RÍO DE JANEIRO, 16 jun (Xinhua) -- La población brasileña envejece, vive cada vez más sola y mayoritariamente vive de alquiler, según reveló un amplio sondeo divulgado hoy por el estatal Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE).
Según la muestra, el 51,1 por ciento de la población brasileña el año pasado eran mujeres, mientras que los hombres eran el 48,9 por ciento.
En los últimos 10 años, la población ha envejecido, y el porcentaje de ancianos de 60 años o más pasó del 11,3 por ciento al 15,1 por ciento. Al mismo tiempo, el porcentaje de personas menores de 30 años descendió del 49,9 por ciento en 2012 al 43,3 por ciento en 2022.
La encuesta revela que las mujeres son las que más viven esta longevidad. Entre la población mayor de 60 años, el año pasado había 78,8 hombres por cada 100 mujeres vivas.
En 2022, el país contaba con un total de 74,1 millones de hogares, de los que el 85 por ciento eran casas y el 14,9 por ciento pisos.
El porcentaje de hogares con un solo residente está creciendo. El año pasado era del 15,9 por ciento del total de viviendas. Diez años antes, era sólo del 12,2 por ciento.
Los hombres viven más solos que las mujeres: de los que viven solos, el 55,4 por ciento son hombres, mientras que este porcentaje es del 44,6 por ciento en el caso de las mujeres.
Al analizar el patrón de edad de las personas que viven solas, se observa que el 12,3 por ciento tiene entre 15 y 29 años; el 45,9 por ciento se encuentra en el grupo de edad de 30 a 59 años y el 41,8 por ciento eran personas de 60 años o más.
En comparación con encuestas anteriores, hay más personas que tienen que pagar un alquiler en el país. El porcentaje de inquilinos alcanzó el 21,1 por ciento en 2022 del total de hogares, frente al 18,8 por ciento de 2016.
La proporción de personas que se autodeclaran negras aumentó del 7,4 por ciento al 10,6 por ciento entre 2012 y 2022, siguiendo la tendencia de los últimos 10 años. La mayoría de los habitantes del país se declaran morenos, pero el porcentaje se ha mantenido estable a lo largo de los años, en torno al 45 por ciento del total.
El porcentaje de negros en el país (que corresponde a la suma de negros y pardos) alcanzó un récord del 55,9 por ciento de la población brasileña el año pasado.
La división por razas en Brasil está marcada por diferencias regionales: los negros son proporcionalmente más en el norte (78,4 por ciento de la población autodeclarada negra) y menos en el sur (26,3 por ciento).
Esta caída en la participación de la población blanca fue más acentuada en la primera mitad de la serie, entre 2012 y 2017, con menor variación en el periodo más reciente.
Según el estudio, 4,4 millones de hogares conectados a la red de abastecimiento de agua no recibían agua diaria en 2022, con el mayor porcentaje en el nordeste: el 28,2 por ciento viven en estas condiciones.
La región norte sigue teniendo el menor porcentaje de hogares conectados a la red general de abastecimiento de agua, con sólo el 60 por ciento de los hogares conectados. En Brasil, la media es del 85,5 por ciento, un porcentaje que se ha mantenido estable desde 2012.
La proporción de hogares conectados a la red general de alcantarillado aumentó del 68,2 por ciento al 69,5 por ciento de todos los hogares del país entre 2019 y 2022. Este porcentaje es mayor (78 por ciento) si consideramos solo los hogares urbanos.
Sin embargo, todavía hay grandes distorsiones regionales en este aspecto: mientras que en San Paulo la tasa alcanzó el 93,6 por ciento, en el estado de Amapá es del 20,7 por ciento de la población.
