QUITO, 12 oct (Xinhua) -- Los candidatos a la Presidencia de Ecuador, Luisa González, y Daniel Noboa, cerraron este jueves su campaña electoral de cara a la segunda vuelta de las elecciones anticipadas del próximo 15 de octubre con mítines, caravanas y una activa presencia en redes sociales.
Tras 19 días de campaña, ambos candidatos realizaron hoy los últimos recorridos por el país en un intento por convencer al electorado indeciso, en medio de una creciente polarización política.
Más de 13,4 millones de ecuatorianos convocados a las urnas elegirán al nuevo presidente entre González, una excongresista de 45 años y candidata del movimiento Revolución Ciudadana (RC5) que lidera el expresidente progresista Rafael Correa (2007-2017), y Noboa, un empresario de 35 años e hijo del magnate bananero Álvaro Noboa, cinco veces candidato presidencial.
Quien gane la elección sucederá al presidente Guillermo Lasso y estará en funciones hasta mayo de 2025, cuando debía terminar el mandato actual.
Lasso acortó su período (2021-2025) después de que el pasado 17 de mayo disolvió el Parlamento y llamó a elecciones anticipadas en medio de una crisis política.
En el último día de proselitismo político, González recorrió la provincia de Manabí, de donde es oriunda, y cerró su campaña en la ciudad costera de Guayaquil (suroeste), una de las más pobladas y violentas del país.
La candidata evocó a la "Revolución Ciudadana", el proyecto político de tinte socialista impulsado por Correa en una década de gobierno, y agradeció las muestras de apoyo de la militancia "correísta".
"Este es el proyecto de país que tenemos, es Revolución Ciudadana. Vamos a cambiar la realidad de este país, vamos a volver a tener una patria digna, una patria de oportunidades", afirmó González, mientras sus seguidores arengaban "Luisa, presidenta" y flameaban banderas con su imagen.
La candidata, que ganó la primera vuelta del pasado 20 de agosto con el 33,61 por ciento de los votos, dijo que el balotaje del próximo domingo es una elección crucial para el futuro de Ecuador.
"El domingo no es cualquier elección, no es una elección más. Nunca tuvimos un Ecuador tan destrozado, nunca tuvimos los niveles de inseguridad que tenemos hoy (...), por eso queremos transformar la patria", dijo la aspirante, vestida con un chaleco antibalas y con resguardo militar ante la ola de violencia que azota al país y que ha alcanzado a políticos.
Por su parte, Noboa, también excongresista y sin un partido político propio, recorrió este jueves la ciudad de Cuenca, en la sureña provincia de Azuay, así como la ciudad de Guayaquil, para luego cerrar su campaña en el balneario de Salinas, en la provincia occidental de Santa Elena.
Noboa, aspirante de la alianza Acción Democrática Nacional (ADN), fue la sorpresa en la primera vuelta al quedar segundo con el 23,47 por ciento de los votos.
El político pidió el apoyo del electorado "para de una vez por todas desterrar a los corruptos, acabar con la impunidad y darles seguridad a las familias ecuatorianas".
"Nosotros vamos con un proyecto sincero, honesto, para sacar adelante al país y dejar las bases para un progreso en los próximos años", señaló, tras prometer que luchará contra las organizaciones narcoterroristas y la violencia, para darle a Ecuador "una nueva esperanza".
En el tramo final de la campaña, ambos aspirantes se centraron en conectar con los jóvenes para captar su voto, que es uno de los más peleados, difundiendo propuestas y compartiendo sus diversas facetas a través de las redes sociales.
Tras el fin de la campaña, desde esta medianoche, regirá el "silencio electoral" para que los ecuatorianos mediten su voto.
















