BEIJING, 13 nov (Xinhua) -- Oswaldo y Gloria, un matrimonio de artesanos de Arequipa, Perú, jamás imaginó que los peluches de alpaca que han fabricado a mano desde su adolescencia se venderían por miles al otro lado del mundo, en la tierra de los pandas y la Gran Muralla, transformando sus vidas para siempre.
"Si no fuera por la alpaca, no estaríamos aquí, en un lugar tan lejano", cuenta a Xinhua Oswaldo Mamani junto a su esposa, pocas horas después de aterrizar en Shanghai, vistiendo la ropa multicolor que identifica a los pueblos andinos.
Tras años de éxito comercial con sus peluches en el mercado chino, la pareja viajó por primera vez al país asiático para participar en la sexta edición de la Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE, por sus siglas en inglés)■