QUITO, 5 dic (Xinhua) -- El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, afirmó hoy martes, durante la posesión de nuevos gobernadores, que el cambio es "urgente" en el país para devolver la seguridad a los ciudadanos, en medio del azote de la delincuencia y la criminalidad que enfrenta la nación.
"El país no puede perder más tiempo, el cambio es urgente y requiere el apoyo de todos los que queremos construir un nuevo Ecuador", dijo Noboa en un discurso, tras tomar juramento y posesionar a 14 nuevos gobernadores en el Palacio de Gobierno en Quito.
El mandatario, que asumió el poder el pasado 23 de noviembre, designó mediante decreto gobernadores en 14 de las 24 provincias del país, la mayoría de los cuales son militares y policías en servicio pasivo.
"Hoy es un gran día para el país porque sumamos excelentes profesionales a nuestro equipo de trabajo con alto compromiso social y comprometidos con los retos que nos hemos trazado", dijo Noboa, tras pedir a los gobernadores trabajar de manera conjunta con el Gobierno.
"La ciudadanía nos eligió porque nosotros dejamos atrás la sed de revancha y venganza, pero también nos exigen mano dura, también nos exigen resultados y debemos nosotros de volver al significado real y antiguo de la gobernabilidad", apuntó.
Noboa señaló que la gobernabilidad "no es reparto" sino "tener a miembros de un equipo que estén comprometidos con su país, con su provincia y con el presidente de la república para hacer las cosas bien, para darle seguridad a los ciudadanos, para estar en constante comunicación con el Gobierno central para poder coordinar tantas cosas que el Ecuador necesita".
Añadió que, en este momento, "falta casi todo" en Ecuador, "menos las ganas", al tiempo que destacó que su Gobierno actúa en gran medida en silencio, pero con acciones está reescribiendo la política nacional.
"Los invito a cada uno de ustedes a ser parte de eso, a ser los representantes del Gobierno nacional en cada uno de los territorios, devolverle la verdadera gobernabilidad a cada una de sus provincias y al país", subrayó Noboa, quien tras 13 días de asumir la Presidencia ya renovó el alto mando de la Policía y de las Fuerzas Armadas para fortalecer su política de seguridad.
En representación de las nuevas autoridades, Alberto Molina, gobernador de la provincia de Guayas (suroeste), una de las más violentas del país, comprometió el apoyo a la hoja de ruta trazada por el Gobierno para devolver la paz social a los ecuatorianos.
"Es el momento de la unidad nacional para juntos enfrentar a la brutal arremetida de las bandas criminales que intentan destruir al país. No descansaremos hasta eliminar el último reducto de esos criminales que intentan doblegarnos", indicó.
Ecuador enfrenta una escalada de la violencia con robos, asaltos, atentados criminales, extorsiones, secuestros y otros delitos, que el Gobierno atribuye a grupos de delincuencia organizada; situación que ubica al país como el más violento de la región.