"Yo no crucé la frontera, la frontera me cruzó", cantan Los Tigres del Norte, una banda bien conocida y formada por un grupo de inmigrantes mexicanos en Estados Unidos, que ofrece un retrato lírico sobre la expansión territorial estadounidense por América Latina en los últimos 200 años, desde la creación de la Doctrina Monroe.
Cuando Estados Unidos se hizo con más de la mitad del territorio mexicano tras su intervención armada contra México, en 1848, la primera y principal arma de la caja de herramientas de la Doctrina Monroe estadounidense era la guerra.