Por Gerardo Laborde
MONTEVIDEO, 2 feb (Xinhua) -- Miles de personas se dieron cita hoy en playas de Uruguay para rendir culto a la diosa del mar, Iemanjá, y pedirle trabajo, amor y salud.
"Es un culto a la naturaleza, por eso el homenaje al agua. Iemanjá personifica en una mujer la grandiosidad de las aguas", señaló a Xinhua Susana Andrade, mae de Umbanda, como se conoce a la guía espiritual de un grupo de esa religión.
La diosa del mar en el culto afroumbandista representada con una imagen similar a la Virgen María del catolicismo, recibe como ofrendas claveles blancos, velas celestes, comida, perfumes y joyas.
A decir de los fieles, Iemanjá cuenta con poderes de gestación, fertilidad y unión de las familias, a la vez que protege a los navegantes.
Esta creencia surge con la población africana esclavizada durante las colonias de Europa en América, que se unió a las culturas nativas indígenas y a los colonizadores que traían su catolicismo cristiano.
"Esas civilizaciones primarias tenían muy claro que esa naturaleza tan próxima era imprescindible para la sobrevivencia de la especie humana", relató Andrade.
Para la sacerdotisa "estas culturas fueron sometidas por las culturas invasoras".
Andrade valoró que la gente "se apoderó del día" y la convirtió en una "celebración popular que trasciende lo sagrado".
"Uruguay es un país muy laico", aseguró en una entrevista con el diario "El Observador" el antropólogo social especializado en religión, Nicolás Guigou.
De acuerdo con la Encuesta de Generaciones y Género, que procesó "El Observador" en junio pasado, el 47 por ciento de los uruguayos declaró que no tiene religión, mientras la mayoría se manifiesta como católico.
Los uruguayos que profesan el afroumbandismo no llegan al 2 por ciento, según este sondeo.
"Muchas veces la gente no va al templo porque todavía hay prejuicio y esta fecha es una oportunidad de sacar el culto a la calle y es una 'puerta de entrada' al culto", sostuvo Andrade al referirse a la veneración que se hace a la diosa cada 2 de febrero.
Con los primeros rayos del Sol de la jornada comenzaron en el río de la Plata algunos rituales; miles de personas observaban desde la orilla la salida de botes con ofrendas.
En 2024 Iemanjá se celebra en medio de una ola de calor con temperaturas que superan los 30 grados Celsius.
En Montevideo, la celebración tiene su máxima expresión en la céntrica Playa Ramírez, en la zona del Parque Rodó.
Allí se instala una feria con artesanías, barcas para realizar ofrendas y objetos alusivos a la diosa.
