BEIJING, 8 mar (Xinhua) -- El llamado trabajo forzado en la región autónoma uygur de Xinjiang, en el noroeste de China, fue desmentido por los diputados de la delegación de Xinjiang durante un panel de discusión abierta realizado en el marco de la segunda sesión en curso de la XIV Asamblea Popular Nacional (APN).
"El supuesto trabajo forzado es un disparate. Puedo usar mi propia experiencia para explicarlo", dijo el jueves Akram Memtimin, un funcionario de la aldea Saymahalla en el distrito de Luntai de Xinjiang, al responder a una pregunta de los medios de comunicación sobre el particular.
En los últimos años, ciertos medios de comunicación extranjeros han estado promoviendo la falacia del "trabajo forzoso" en la industria algodonera de Xinjiang, y Estados Unidos ha impuesto sanciones a los productos de este sector.
Akram Memtimin afirmó que tales reportes noticiosos son incomprensibles. "El algodón es el principal cultivo en nuestra aldea, del que el año pasado plantamos más de 506 hectáreas", señaló y agregó que esta actividad se ha vuelto más conveniente como resultado de los avances tecnológicos, entre ellos el uso de drones para rociar pesticidas y la instalación de sistemas de navegación por satélite en las sembradoras.
"La recolección manual de un kilogramo cuesta dos yuanes (alrededor de 28 centavos de dólar), y para un campo de una hectárea con un rendimiento de 4.500 kilógramos, eso sería 9.000 yuanes. En comparación, la recogida mecanizada solo vale 2.250 yuanes por hectárea", explicó el funcionario.
Con cifras como estas, considera razonable cuestionar la necesidad de la coerción. "Este algodón blanco como la nieve es nuestra fuente de ingresos. Nos ganamos bien la vida. Compramos autos y nos mudamos a casas modernas cultivándolo. ¿Necesitamos que nos obliguen a hacerlo?", preguntó.
Jin Zhizhen, un funcionario local, reveló que la producción algodonera de Xinjiang superó los cinco millones de toneladas en 2023, lo que representa más del 90 por ciento del total nacional, y su tasa de cosecha mecanizada estuvo por encima del 85 por ciento.
Asimismo, indicó que esta industria es uno de los pilares de la economía de Xinjiang y una importante fuente de ingresos para las personas de todos sus grupos étnicos.
A su vez, destacó que la totalidad de las empresas involucradas en la cadena industrial firman contratos con sus empleados de acuerdo con la Ley Laboral y la Ley de Contratos Laborales de China con el fin de garantizar sus ingresos legales y las prestaciones de la seguridad social.
"Las sanciones de Estados Unidos sobre el algodón de Xinjiang son esencialmente un intento de utilizar el 'trabajo forzado' como un pretexto para crear desempleo forzoso y pobreza en la región, socavando su prosperidad y estabilidad y frenando el desarrollo de China", enfatizó Jin quien ve poco probable que los intentos estadounidenses de suprimir esta industria tengan éxito, y agregó que el algodón de Xinjiang seguirá siendo popular en todo el mundo por su alta calidad.