ASUNCIÓN, 28 oct (Xinhua) -- El Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social de Paraguay informó este viernes, a través de una conferencia de prensa, que fue confirmado el tercer caso positivo de viruela símica en el país.
Se trata de una persona de sexo masculino, de nacionalidad paraguaya, con una edad entre 40 a 50 años, con residencia en la capital Asunción y sin antecedentes de viaje recientes al exterior.
Cabe señalar que los casos anteriores fueron comunicados el 25 de agosto y 29 de septiembre pasados, respectivamente, ambos en el departamento Central; mientras que a la fecha fueron descartados un total de 73 casos sospechosos.
El director general de Vigilancia de la Salud, Guillermo Sequera, declaró al respecto que el paciente afectado se encuentra en situación estable, con manejo ambulatorio, principalmente para la gestión del dolor de las lesiones.
Agregó que la dirección a su cargo, sigue realizando el seguimiento activo del paciente, así como de su entorno y contactos en el país, para monitorear posibles nuevos casos sospechosos de la enfermedad.
Explicó que el paciente presentó síntomas iniciales el pasado 20 de octubre, manifestando fiebre, cansancio, dolor muscular y dolor de cabeza; iniciando al día siguiente las erupciones cutáneas en el cuello, cuero cabelludo, tronco y miembros superiores e inferiores.
Añadió que recurrió a la consulta médica cuatro días después, donde solicitó se le practique la prueba por iniciativa propia.
El funcionario refirió que los dos últimos casos de la enfermedad en el país hacen referencia a infecciones por transmisión comunitaria, por no poseer antecedente de viaje ni contacto con viajero proveniente del exterior.
"Preocupa que el virus está circulando como una epidemia silenciosa; estamos viendo muy pocos casos y el contagio se realiza en nuestra comunidad", expresó.
Por tal motivo, alentó a la ciudadanía en general a no postergar la consulta médica ante la aparición de erupciones en la piel y de esta manera, frenar los contagios.
"No debemos minimizar las lesiones, principalmente si aparecen en los genitales, el silencio puede ser perjudicial", alertó el profesional.
