QUITO, 17 dic (Xinhua) -- Un Tribunal Penal de Ecuador condenó a nueve años y tres meses de prisión a nueve miembros de la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), tras declararlos culpables del delito de sabotaje, informó hoy miércoles la Fiscalía General del Estado.
La sentencia fue impuesta "en grado de participación por omisión", por la destrucción de un radar ubicado en el cerro Montecristi, en la provincia de Manabí (oeste), ocurrida en noviembre de 2021, según indicó el Ministerio Público en un comunicado.
La Fiscalía precisó que la condena fue impuesta contra Edison G., Álex C., Jesús Z., Ítalo S., Cristhian C., Kleber Ch., Cristhian A., Fernando M. y Brayan Ch., quienes el día de los hechos estaban a cargo del patrullaje y la custodia del equipo de vigilancia militar que fue destruido.
El Tribunal informó que en la sentencia escrita se detallarán los montos correspondientes a las multas y a la reparación integral que deberán cubrir cada uno de los sentenciados.
El hecho ocurrió el 7 de noviembre de 2021, cuando una explosión destruyó el radar, recientemente instalado, en el cerro Montecristi, destinado a la vigilancia de posibles aeronaves no autorizadas en la zona.
Durante la audiencia de juzgamiento, el fiscal del caso presentó 60 pruebas testimoniales y un número similar de pruebas documentales.
Entre ellas constan 20 pericias desarrolladas durante la investigación, que incluyeron dos asistencias penales internacionales, una con Estados Unidos y otra con el Reino de España.
"Los análisis confirmaron la utilización de explosivos de alto poder, como PETN, RDX y TNT, lo que provocó la destrucción total del equipo de vigilancia y descartó la hipótesis de una falla mecánica", señaló la Fiscalía.
Agregó que, según los análisis, "este tipo de explosivos es de uso exclusivo de las Fuerzas Armadas, requiere manejo especializado y posee una alta capacidad destructiva, dejando escaso rastro tras su detonación".
De acuerdo con la Fiscalía, estas conclusiones coinciden con el informe de la Junta de Investigación de Accidentes de la FAE, que determinó que la destrucción del sistema de vigilancia no pudo ser consecuencia de una falla mecánica o electrónica.
Asimismo, se respaldan con informes de la empresa fabricante del radar, que ratifican los resultados de los peritajes, además de documentación que establece que el área donde se encontraba el equipo había sido declarada zona estratégica para la seguridad nacional.
En este caso, 10 personas fueron llamadas a juicio; sin embargo, uno de los implicados falleció, por lo que se extinguió la acción penal en su contra.









