LA PAZ, 17 dic (Xinhua) -- El Gobierno de Bolivia declaró este miércoles la alerta epidemiológica nacional por la influenza A H3N2, subclado (variante) K, una decisión que las autoridades definieron como preventiva y anticipatoria, en un contexto de aumento de la circulación del virus a nivel internacional, pero sin escenarios de descontrol interno.
La medida fue anunciada en una conferencia de prensa conjunta por la ministra de Salud, Marcela Flores, y la portavoz presidencial, Carla Faval, quienes subrayaron que la alerta busca reforzar la vigilancia sanitaria y proteger a los sectores más vulnerables de la población.
"Esta determinación responde al comportamiento de la influenza A H3N2, variante K en el ámbito internacional y se adopta bajo el principio de anticiparnos para proteger al país", afirmó Faval, al precisar que se han activado y reforzado los controles sanitarios en aeropuertos, puntos de ingreso al territorio nacional y espacios identificados como de mayor riesgo de contagio.
La vocera recalcó que la decisión no responde a una crisis sanitaria, pues, aseveró "no existe una situación de descontrol, pero sí un escenario que exige prevención".
Por su parte, la ministra Flores explicó que la alerta se enmarca en una estrategia de gestión de riesgo proactiva, orientada a evitar una eventual saturación del sistema de salud.
"No esperamos que la situación se agrave para recién actuar. Esta alerta nos permite fortalecer la detección temprana y la respuesta inmediata", añadió.
La titular de Salud indicó que la medida incrementa la sensibilidad del personal sanitario para identificar oportunamente los síntomas de la influenza A H3N2, variante K y priorizar la atención de niños, adultos mayores y personas con enfermedades de base, considerados grupos de mayor riesgo.
Además, la alerta sanitaria habilita mecanismos administrativos para agilizar la logística y el abastecimiento de insumos y medicamentos críticos.
"Actuamos con base en evidencia científica sólida para prevenir hospitalizaciones innecesarias, colapsos y proteger nuestros servicios de salud", afirmó Flores, quien descartó un escenario alarmista.
"Esta variante no es más letal que otras formas de influenza. Circula en el mundo desde 2006 y lo que observamos son mutaciones que incrementan su capacidad de transmisión, no su mortalidad", añadió.
Según detalló, la variante presenta cambios en tres proteínas que facilitan el contagio de persona a persona, aunque los síntomas se mantienen similares a los de otras influenzas estacionales.
"Es ligeramente más contagiosa y eso puede generar mayor presión sobre el sistema sanitario, razón por la cual se emitió la alerta", precisó Flores.
Bolivia ha registrado 27 casos confirmados de influenza A H3N2 en lo que va del año, sin reportes de circulación de variantes más agresivas, como la K, por lo que la ministra aseguró que "los números están controlados y no se ha identificado un mayor grado de severidad".
En cuanto a la capacidad hospitalaria, Flores señaló que se instruyó a los hospitales de segundo y tercer nivel a mantenerse preparados para atender posibles complicaciones.
Sobre las vacunas, la ministra informó que el país cuenta con existencias disponibles y que ya se activaron gestiones para reforzar el suministro.
"Estamos coordinando con el Ministerio de Economía para garantizar recursos para nuevas provisiones", indicó.
"No estamos frente a un virus más letal, pero sí ante uno más contagioso. La clave es anticiparnos, cuidarnos y proteger a quienes más lo necesitan", enfatizó Flores.









