RÍO DE JANEIRO, 2 ago (Xinhua) -- Las importantes cosechas brasileñas de soja y las grandes importaciones chinas han convertido a Brasil y China en socios imprescindibles, afirmó el portavoz de la Asociación Nacional de Exportadores de Cereales (Anec), Sérgio Medeiros.
En una entrevista a Xinhua, Medeiros aseguró que "actualmente, las ventas a China representan entre el 70 y el 73 por ciento de nuestras exportaciones de soja. Son números súper importantes".
Según datos de la Anec, entre enero y julio, Brasil exportó 73,88 millones de toneladas de soja en grano, alcanzando prácticamente la misma cantidad que exportó el año pasado (77,8 millones de toneladas), mientras China fue el destino del 71 por ciento de los embarques de soja brasileña, superando ampliamente el segundo mayor comprador, España (con un 4 por ciento).
Durante los últimos años, los productores sudamericanos están comenzando a dominar las ventas de soja al mercado chino.
"La soja es el principal producto de la balanza comercial brasileña, si China importa tanta soja brasileña, esto demuestra lo importante que es para nosotros", resaltó el entrevistado, al tiempo que subrayó que la soja brasileña acaba siendo lo más conveniente para los chinos desde el punto de vista económico.
El valor de las exportaciones brasileñas de soja a China aumenta al mismo nivel que la cantidad de granos enviada al exterior: en 2021, totalizó 26.500 millones de dólares y en 2022, 31.800 millones. En el primer semestre de este año, la facturación alcanzó los 23.100 millones de dólares.
"Ningún otro país tiene la capacidad de compra de soja que tiene China", dijo Medeiros, quien agregó que la buena relación comercial que mantienen China y Brasil hace que "automáticamente, seamos un suministrador muy importante para ellos, y esto acaba beneficiando a otros productos también".
En este sentido, Medeiros comentó que desde diciembre del año pasado, Brasil empezó a exportar maíz a China.
"Acabamos de iniciar el suministro de maíz a China en diciembre pasado, es muy reciente", dijo, argumentando que es una señal de diversificación de productos agrícolas brasileños para exportación a China.
El mantenimiento de buenos nexos comerciales con China también refleja el plan del presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, de considerar al país asiático como parte del plan de crecimiento económico del mayor país de América Latina.