MÉXICO, 12 ene (Xinhua) -- La entrada en vigor el 1 de enero del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre China y Nicaragua es para el país centroamericano un paso significativo hacia un horizonte de oportunidades y perspectivas prometedoras para el desarrollo, han destacado distintos actores económicos y gubernamentales nicaragüenses.
El TLC con China ha generado numerosas expectativas en Nicaragua y un ejemplo tangible de ello lo constituye la cooperativa "El Gorrión R.L.", en el departamento de Jinotega (norte), cuyos productores, mayormente cafeteros, se preparan para aprovechar las ventajas del acuerdo comercial y exportar su café al país asiático.
En un reporte de la televisora local nicaragüense Canal 8, los cafeteros de El Gorrión expresaron su entusiasmo por las "posibilidades gigantes" que se les presentan con la apertura del mercado chino.
Su cooperativa, de 33 años y con más de 30 exportando a diferentes países, se erige como un modelo de éxito en la exportación nicaragüense, que ahora, gracias al TLC, puede incrementarse a partir de la demanda de café de los consumidores de China.
El Gorrión tiene más de 577 socios, entre ellos 288 productores de café. Javier Antonio Forno, vicepresidente de la cooperativa, destacó en el reporte la calidad y aceptación del café que producen, las cuales, dijo, pudieron constatar hace poco más de dos meses en Shanghai los productores que asistieron a la sexta Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE, por sus siglas en inglés).
Forno subrayó que ya han dejado muestras de sus variedades de café en China y están en proceso de establecer negociaciones, lo cual revela el interés chino por los productos nicaragüenses.
El presidente del Banco Central de Nicaragua, Ovidio Reyes, alabó la disponibilidad actual en El Gorrión de 12.260 quintales de café oro para exportar a China y aprovechar de inmediato las oportunidades derivadas del TLC.
Pero el caso de El Gorrión es solo una muestra de todo el intercambio comercial entre Nicaragua y China que puede derivarse de la entrada en vigor del TLC.
Jesús Bermúdez, ministro de Fomento, Industria y Comercio de Nicaragua, ponderó como un elemento crucial del instrumento comercial la complementación económica que favorece entre los dos países.
China, al abrir su mercado para las exportaciones nicaragüenses, crea un panorama propicio para el crecimiento comercial del país centroamericano.
El enfoque de Nicaragua en los próximos años es ambicioso, pero alcanzable, se trata de quintuplicar las exportaciones al país asiático en el primer quinquenio de la vigencia del tratado, según afirmó Bermúdez en entrevista con Canal 8.
"Pretendemos nosotros llegar en unos cinco años a exportar 1.000 millones de dólares a China. Esperamos que esa cantidad comience este año con 200 millones de dólares", afirmó el ministro.
La eliminación de aranceles para productos como café, carne, pescados, mariscos, azúcar, textiles, arneses, ron, chocolate, jugos y carbón ofrece un terreno fértil para ese crecimiento económico, en tanto son productos que representan el pulso de la economía nicaragüense.
De acuerdo con cifras oficiales, el 71 por ciento de todo lo que Nicaragua exportó en 2023 puede exportarse a China sin aranceles ni gravámenes desde el 1 de enero de 2024, un hecho que favorece el flujo constante de bienes nicaragüenses hacia el mercado chino.
En cuanto a las importaciones desde China, que ascendieron en 2023 a 1.300 millones de dólares según cifras oficiales nicaragüenses, se espera un crecimiento a 2.000 millones de dólares en los próximos años.
Bermúdez estimó que China podría convertirse en un proveedor crucial para Nicaragua, especialmente en productos de consumo como electrodomésticos y vehículos, ofreciendo a la población nicaragüense una relación calidad-precio favorable.
Desde la perspectiva gubernamental de Nicaragua, el TLC con China es un hito en las relaciones entre ambos países, que genera altas expectativas en los resultados inmediatos y se presenta como una "gran oportunidad para los productos nicaragüenses en el gran mercado chino".
Así dijo a Xinhua Laureano Ortega, asesor para la Promoción de Inversiones, Comercio y Cooperación Internacional de la Presidencia nicaragüense, en el contexto del segundo aniversario del restablecimiento de relaciones diplomáticas entre China y Nicaragua, el pasado 10 de diciembre.
La alcaldesa de Managua, Reyna Rueda, al analizar el potencial impacto del TLC, fue más allá de los aspectos comerciales tradicionales y afirmó que el instrumento puede beneficiar de manera integral a la infraestructura y el empleo local.
Para Rueda, el tratado contribuirá al aumento del empleo tanto en Managua, capital de Nicaragua, como en diversas ciudades y localidades del país centroamericano, impulsado por el aumento de inversiones y el dinamismo económico generado por el intercambio comercial.
Pero en el camino a la materialización óptima de todas las expectativas y beneficios esperados, Nicaragua afronta desafíos como el aumento de los niveles de producción para satisfacer la demanda de los diversos mercados a los que exporta, apuntó Reyes.
Para vencer el reto, agregó, el Gobierno trabaja directamente en el acompañamiento a los productores, de manera tal que estos puedan aprovechar las oportunidades generadas por el TLC en su totalidad, tal y como desde el 1 de enero se disponen a hacerlo los cafeteros de El Gorrión.
