Por Yosley Carrero
Imagen del 16 de noviembre de 2022 de un agricultor trabajando en el cultivo de hortalizas en una finca, en el municipio Güines, en la provincia de Mayabeque, Cuba. Cuba mantiene su apuesta por la agricultura ecológica en medio de los esfuerzos para aumentar la producción nacional de alimentos, la intensificación del bloqueo de los Estados Unidos contra la isla y la gradual recuperación de la economía en el contexto postpandemia. (Xinhua/Joaquín Hernández)
MAYABEQUE, Cuba, 21 nov (Xinhua) -- Cuba mantiene su apuesta por la agricultura ecológica en medio de los esfuerzos para aumentar la producción nacional de alimentos, la intensificación del bloqueo de los Estados Unidos contra la isla y la gradual recuperación de la economía en el contexto postpandemia.
En el municipio Güines de la provincia de Mayabeque, a unos 45 kilómetros de la capital de Cuba, La Habana, está la Finca Ayala, dedicada a la ganadería, la producción de frutales y el alimento animal.
Al frente de la finca está Odrey Orta, de 59 años, quien lleva más de tres décadas en el mundo de la agricultura y ahora lidera uno de los principales proyectos agroecológicos en su territorio.
Con cultivos de maíz, boniato (camote), yuca y plátano ha sido capaz de producir distintos tipos de piensos ante la imposibilidad de acceder a los productos de alimento animal que tradicionalmente eran importados.
En un área de cinco caballerías de tierra (165 hectáreas), Orta atiende plantaciones de mangos, cocos, guayabas y otras frutas que son comercializadas en los puntos de venta de la cooperativa agropecuaria a la que pertenece y en la mini-industria.
Con el apoyo de su familia y trabajadores de la comunidad, también cría cerdos, carneros, chivos, ocas, así como ganado vacuno dirigido a la producción de carne.
"Aquí se ara la tierra con tractor y luego se trabaja con tractor. No utilizo ningún químico, pero estoy satisfecho con esto. Debería mucha gente insertarse en esto", precisó.
"Uno se va enamorando de los animales. Usted tiene que estar donde le guste y esto es lo que me gusta a mí", agregó.
Su hija Meliza Orta, de 23 años, se graduó como técnica veterinaria y ahora alterna sus responsabilidades en la finca con su centro laboral.
"Nací entre los animales. Ayudo a mi padre a trabajar. Esto favorece la economía familiar y el consumo social. Me encanta este modo de vida", comentó a Xinhua mientras alimenta parte de la cría de cerdos.
De acuerdo con la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP), Cuba dispone de más de 1.500 fincas agroecológicas, las cuales son clasificadas atendiendo a la forma de conservación de los recursos naturales, así como al modo de cosecha, cultivo e integración de los productores y la naturaleza en la producción de alimentos.
Entretanto, en la cooperativa de producción agropecuaria Humberto Hernández, también en la provincia de Mayabeque, 58 familias de campesinos se encargan del abastecimiento local de viandas, vegetales y hortalizas.
"Antes había un huerto bien pequeño, pero luego este proyecto creció con la construcción de un organopónico. Después de que creamos esto garantizamos todas las especias del municipio donde nos encontramos. Vendemos yuca, calabaza, plátanos, entre otros productos", aseguró el director de la cooperativa, Omar Hernández.
Estas acciones se inscriben dentro del paquete de 63 medidas aprobadas por el gobierno cubano en abril de 2021 con el propósito de acelerar la producción nacional de alimentos.
Para la especialista del Instituto de Ciencia Animal en la provincia Mayabeque, Katia Hidalgo, la agroecología le permite a la isla caribeña cortar la dependencia de insumos importados, al tiempo que se promueven prácticas agrícolas en armonía con la naturaleza.
"Somos un país pionero en la agroecología. Lo positivo de esto es que no tenemos que partir de ningún producto internacional para obtener buenos resultados. Estamos hablando de un ciclo cerrado donde se incluyen el uso del compost, la excreta animal y la lumbricultura a partir de materiales reciclables de la misma finca", comentó.
Por su parte, el director nacional de proyectos de cooperación internacional de la ANAP, Rolando García, dijo a Xinhua que el movimiento agroecológico reviste medular importancia para el desempeño económico del país caribeño.
"La agroecología tiene un gran valor por lo que representa en el desarrollo agrícola, en la seguridad alimentaria de todos nuestros productores, de todas las cooperativas en el país. Hoy el campesinado cubano está aportando a través del movimiento agroecológico, el desarrollo de su finca y la producción de alimentos", agregó.
Imagen del 16 de noviembre de 2022 de un ganadero dando de beber a una vaca en la Finca Ayala, en el municipio Güines, en la provincia de Mayabeque, Cuba. Cuba mantiene su apuesta por la agricultura ecológica en medio de los esfuerzos para aumentar la producción nacional de alimentos, la intensificación del bloqueo de los Estados Unidos contra la isla y la gradual recuperación de la economía en el contexto postpandemia. (Xinhua/Joaquín Hernández)
Imagen del 16 de noviembre de 2022 de un agricultor trabajando en el cultivo de café en una finca, en el municipio Güines, en la provincia de Mayabeque, Cuba. Cuba mantiene su apuesta por la agricultura ecológica en medio de los esfuerzos para aumentar la producción nacional de alimentos, la intensificación del bloqueo de los Estados Unidos contra la isla y la gradual recuperación de la economía en el contexto postpandemia. (Xinhua/Joaquín Hernández)
Imagen del 16 de noviembre de 2022 de Meliza Orta, de 23 años, dando de comer a una manada de cerdos en un área de la Finca Ayala, en el municipio Güines, en la provincia de Mayabeque, Cuba. Cuba mantiene su apuesta por la agricultura ecológica en medio de los esfuerzos para aumentar la producción nacional de alimentos, la intensificación del bloqueo de los Estados Unidos contra la isla y la gradual recuperación de la economía en el contexto postpandemia. (Xinhua/Joaquín Hernández)