China anunció el 17 de diciembre una relajación sustancial de la política de tránsito sin visado, con el fin de promover aún más la apertura internacional y los intercambios entre personas.
La Administración Nacional de Inmigración (ANI) informó que la estancia permitida de los viajeros extranjeros elegibles ha sido extendida de las 72 y 144 horas iniciales a 240 horas, equivalentes a 10 días.
Estos viajeros ahora pueden ingresar a través de cualquiera de los 60 puertos en 24 provincias, regiones y municipalidades.